El Psicópata y sus MENTIRAS

Cuando la pareja del psicópata se separa de él, aunque casi siempre el que abandona la relación es el psicópata, se produce un shock traumático y unas ansias de volver con él similares a la adicción de un alcohólico; pero una adicción al fin y al cabo. La diferencia estriba en que al alcohólico se le entiende, es un enfermo, pero a la pareja del psicópata no, sencillamente porque la sociedad se ha encargado de que al oír la palabra psicópata se relacione con asesinos o violadores, cuando la pareja lo que necesita es superar una adicción y recibir apoyo. A veces, la sociedad, la familia y el entorno no comprenden qué es un psicópata y porqué el anclaje a él. La ayuda externa es fundamental: familiar, terapéutica, etc., ya que la pareja del psicópata al romper la relación se desmorona hasta tal punto que ya no quiere vivir. Su mundo se torna hostil y gris y la soledad que se siente es intensa. El "mono" de los primeros meses le va a dejar traumas o secuelas. El hecho de habe

Los psicópatas observan objetivamente a las personas de su entorno y fijan un objetivo, una presa, una pareja, un amigo, un compañero de trabajo, etc., alguien a quien ven una mente y alma transparentes y que pueden parasitar. Ellos ven al resto como cosas, en psiquiatría se denomina a este hecho: cosificación de las personas. No nos ven como personas sino como objetos. Incluso pueden llegar a un estado de inexpresión en el funeral de su madre que nunca hubiese creído de no haberlo visto con mis propios ojos. Una vez fijado el objetivo y con verdadera obsesión, se centran única y exclusivamente en cazar a su presa, olvidándose de todo lo demás. Comienzan estudiándolo todo de ella: su físico, su carácter, su entorno... Luego con preguntas sutiles y fingiendo empatía se enteran de toda su vida y comienza la etapa de "estudio de estrategias". Las diferentes estrategias que ellos utilizan las tienen pausadas y obsesivamente estudiadas y fijadas "a fuego" en su mente